La reducción de la jornada laboral a 40 horas: ¡un tema que divide hasta a los sindicatos! La CTM, en un acto de rebeldía digno de aplauso, sorprendió al exigir que esta utopía se concrete en un máximo de dos años, desoyendo el acuerdo de Palacio Nacional de hacerlo ¡gradual hasta 2030!.
¿Será que la poderosa confederación del priismo dorado se puso "respondona" porque se siente ninguneada por el morenismo, que favorece a la Catem de Pedro Haces?. El propio Pedro Haces, con su humildad característica, deslizó que la reforma "avanza con acuerdos", confirmando el plan gradualísimo de la presidenta Sheinbaum. ¡Qué armonía!
Además, Haces nos regaló una perla al afirmar que en San Lázaro "se legisla no bien, sino perfecto" en derechos laborales de plataformas. Una "perfección" tan absoluta que ha motivado protestas por la "falta de claridad" en impuestos y cuotas. ¡La perfección es, a veces, una cruel ironía para los trabajadores!.
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