Mientras el mundo observa cómo EU, Israel e Irán coquetean con la guerra, aquí nos preocupamos por nuestra ensalada: el Tío Sam evalúa si reactiva aranceles al jitomate mexicano.
Nuestro querido Donald Trump, el rey del "Trump Always Chickens Out", sigue dándonos respiros internacionales al rajarse de sus ímpetus bélicos. Pero el subsecretario Christopher Landau anda más que pendiente, tildando de "insólita" la idea de que China pueda ser mejor socio comercial. ¡Con transacciones de 839 mil millones de dólares, quién necesita soberanía!.
La presidenta Sheinbaum, fiel a nuestra política de "llamando a la paz", anhela un "acuerdo global" con Trump "prontito", aunque la Casa Blanca tenga "otras prioridades". Y con el "factor visa" en el horizonte para 2027, el Tío Sam se perfila como aliado inesperado para la oposición.
¡Ay, México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos!.
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